En Fatás Dental prestamos especial atención a esta especialidad y a su vinculación con el campo de la odontología.
La osteopatía y la odontología son especialidades médicas que están relacionadas: los problemas que afectan a la boca y los dientes pueden tener efectos directos sobre el resto del cuerpo y viceversa.
Todos los huesos del cuerpo están conectados entre sí; algunos, de forma compleja. Las patologías, lesiones dentales y traumatismos restringen el movimiento de estos huesos y como consecuencia pueden causar afectaciones en otras partes del organismo. Para restaurar la función de estos huesos y músculos, la osteopatía es una terapia clave.
El cuerpo humano está totalmente coordinado y en relación: órganos con músculos y emociones, cabeza con pies (a través de la columna vertebral), etc. Cualquier anomalía o tratamiento en la cavidad oral y piezas dentarias, puede provocar tensiones en el resto del cuerpo. Por ejemplo, si se mueve un diente, la tensión que se provoca como consecuencia del movimiento se transmite al hueso de soporte, que está en la cara y, por ende, afecta a todo el cráneo. Del cráneo, la tensión se traslada a las cervicales altas y desde allí al resto de la columna vertebral, torso y extremidades.
Otras patologías, como el bruxismo o apretamiento dental, pueden provocar iguales consecuencias: dolor cervical, migrañas, o lesiones en la articulación temporomandibular (ATM).
No invasiva y totalmente natural
La osteopatía es una terapia natural no agresiva y holística (global), cuyo objetivo es solucionar disfunciones y tratar problemas mecánicos del cuerpo. Entonces, la osteopatía y la odontología holística tratan patologías de forma no invasiva y respetando la globalidad del individuo. El organismo, ayudado por la osteopatía, posee la energía vital necesaria para recuperar los desajustes y así restablecer el equilibrio fisiológico y la salud.
