En la sociedad actual, cada vez son más las personas que se preocupan por su propia estética y, de entre los distintos ámbitos que ésta engloba, la cosmética dental es de los más importantes.
La sonrisa es nuestra carta de presentación al mundo, uno de nuestros más preciados puntos fuertes. El buen estado de la misma nos aporta seguridad, siendo también un gran soporte para nuestras relaciones interpersonales. Para mantener una sonrisa que cumpla con los parámetros actuales, la higiene oral debe ir acompañada de una consciente alimentación, esto es, el paciente debe tener en cuenta los efectos de determinados alimentos y bebidas sobre sus dientes.
Lucir una sonrisa blanca y reluciente es el objetivo máximo de los pacientes, siempre ayudados por su dentista y unos adecuados hábitos de higiene oral. Aunque el cepillado y el uso de hilo o cera dental, así como utilizar enjuagues bucales, son prácticas esenciales para mantener unos dientes sanos y estéticamente agradables, la alimentación también desarrolla un papel en ello. La verdad, existen determinados alimentos y bebidas que, debido a su composición, pueden producir manchas en el esmalte dental. No se trata de evitar la ingesta de dichos alimentos para lucir unos dientes en buen estado, sino de controlar su consumo y, sobre todo, tener siempre presente las consecuencias que pueden ocasionar en la integridad de nuestra sonrisa. Así, ¿cuáles son los alimentos que pueden manchar tus dientes?
- Café: actualmente, el café es una de las bebidas de uso generalizado entre la población que más daño ocasiona a la coloración natural de los dientes. Su color oscuro y su composición química pueden manchar el esmalte dental, estando su afectación relacionada con la cantidad de café ingerido.
- Té: como el café, el té también dispone de un alto poder de coloración. Sobre todo el té negro, rico en taninos, es realmente perjudicial para nuestros dientes. Los tés verdes o blancos, por ejemplo, son menos propensos a manchar los dientes, aunque su consumo reiterado se convierte en una causa de ello.
- Vino Tinto: numerosos estudios científicos han sugerido que el vino tinto, una bebida ácida que contiene cromógenos y taninos, es también propenso a generar manchas en los dientes.
- Dulces: caramelos, chicles, helados y demás dulces suelen contener agentes colorantes que provocan la tinción de los dientes. Sin embargo, a menos que se consuman con excesiva regularidad, los dulces juegan un papel menor en la tinción de los dientes.
- Frutos rojos: cerezas, moras, frambuesas, fresas,… Estos alimentos están repletos de antioxidantes, pero su potente pigmento se adhiere al esmalte dental y, así, es capaz de mancharlo. La acidez de los cítricos también puede producir esta misma acción.
El consumo abusivo de ciertos alimentos y bebidas puede ser realmente perjudicial para nuestra sonrisa, causando manchas que dañan su apariencia. Para mantener unos dientes blancos y relucientes, llevar a cabo unas prácticas de higiene oral adecuadas y controlar la ingesta de dichos alimentos es la mejor medida preventiva.